Antes de seguir con el artículo, es recomendado leer el "Fichaje de Kubala" para entender el contexto del caso Di Stéfano.
La siguiente investigación se divide en tres partes:
En noviembre de 1948, los futbolistas argentinos se declararon en huelga. El detonante fue la desproporción existente entre los ingresos de los clubes y el salario de los jugadores.
Fueron 57 jugadores los que decidieron fugarse y probar suerte en Colombia, entre ellos se encontraba Alfredo Di Stéfano. La huelga provocó el alejamiento de los jugadores más famosos, desvalorizando de manera significativa al fútbol argentino.
Di Stéfano firmó entonces por el Millonarios, equipo colombiano, presidido por Alfonso Senior.
La FIFA reaccionó expulsando a Colombia de su organismo. Se decretó la prohibición, para el resto del mundo, de concertar partidos amistosos con los equipos de la liga colombiana.
Tres años más tarde, en 1951, se llegó a una resolución del conflicto entre la Federación Colombiana y la FIFA, llamado el “Pacto de Lima”. El acuerdo estipulaba que los jugadores "fugados", seguirán siendo propiedad del correspondiente club colombiano donde jugaban hasta el término del contrato en curso, fecha a la cual la propiedad del jugador regresaría a su club de origen.
Con eso resuelto, los clubes colombianos ya podían jugar amistosos al exterior de Colombia. Eso permitió al Millonarios hacer una gira por Europa en marzo de 1952, que incluyó su presencia en los actos principales del Cincuenta Aniversario del Real Madrid. Un triangular entre el Madrid, el Norrköping y el Millonarios. Lo ganó el Millonarios y Di Stéfano deslumbró con su juego. En ese momento, el jugador argentino pertenecía al club colombiano hasta el 15 de octubre de 1954, y con el compromiso de retornar al River Plate a partir del 1 de enero de 1955.
En septiembre de 1952, Kubala sufre una importante enfermedad pulmonar. Los pronósticos son muy pesimistas y los médicos le declaran “no apto para el deporte”. Se teme un final precipitado de su carrera como futbolista. Para mantener la supremacía alcanzada en el fútbol español, Enrique Marti Carreto, presidente del Barça, encarga a Josep Samitier encontrar la nueva perla del fútbol mundial. El Secretario Técnico, tras estudiar las diferentes opciones, entra en contacto con Alfredo Di Stéfano. El argentino se deja querer y comenta al Barça la particular situación contractual en la que se encuentra.
Enrique Martí se dirige directamente al River Plate, encuentra un acuerdo con el club de Buenos Aires por unos cuatro millones de pesetas. Entretanto, en febrero, Kubala superó milagrosamente su infección tuberculosa y volvía a los terrenos de juegos. El Barça se proclamó, el 03 de mayo, campeón de Liga.
Después de llegar a un acuerdo verbal con el Di Stéfano, Josep Samitier le recibió a él y a su familia en Barajas el 22 de mayo de 1953. Al día siguiente el argentino ya se encontraba en la ciudad condal. La "Saeta Rubia" visitó el estadio del Barcelona y conoció personalmente a Kubala.
Mientras tanto, el Millonarios, conocedor de la operación, había denunciado la maniobra del Barça ante la FIFA. El presidente del club colombiano, que era hombre de alto vuelo en el fútbol internacional, tenía además razón. Di Stéfano pertenecía al Millonarios hasta el final de 1954, sólo a partir de enero de 1955 volvería a ser propiedad de River. Los derechos que había comprado el Barça, de facto, no podrían entrar en vigor hasta esa fecha.
La FIFA, que seguía pendiente del litigio por Kubala, advirtió a la Federación Española de que Di Stéfano no podía jugar en el Fútbol Club Barcelona.
Enrique Martí Carreto, entonces presidente del club azulgrana, declaró que aprovecharía la gira del Barça por América, entre el 08 de julio y el 07 de agosto de 1953, para solucionar el “caso Di Stefano” con el club colombiano. Allí se entrevista con Alfonso Senior, presidente del Millonarios, con el que no llega a un acuerdo. El presidente del club colombiano, a quién pertenece Di Stéfano hasta 1954, le pide 27.000 dólares, lo equivalente a 1.350.000 pesetas. Enrique Martí Carreto no lo encuentra razonable.
El presidente Martí Carreto y el secretario Llensa se reúnen en el hotel "El Pinar de Caracas" junto al abogado Trías Fargas para comunicar que desestiman la propuesta del Millonarios de jugar un partido amistoso en Bogotá aprovechando la gira del equipo catalán para abaratar el precio del fichaje de Di Stéfano.
El presidente del Barça entiende que el Millonarios quiere sacar un dinero excesivo, y le comenta que está dispuesto, si hiciera falta, a tener al delantero un año y medio sin jugar, hasta que se cumpla el plazo de propiedad del Millonarios.
“El Barcelona está dispuesto a tener a Di Stéfano una temporada completa sin jugar. Millonarios debe rebajar sus exigencias. Hemos pagado un millón de pesos argentinos por el traspaso de Di Stéfano al club argentino River Plate y si el Club Millonarios no acuerda también el traspaso, Di Stéfano quedará inactivo durante un año y luego jugará por el Barcelona"
Estas declaraciones (publicadas el 04 de agosto de 1953 en la prensa española) tras la fallida negociación con el Millonarios, no le hizo ninguna gracia a Di Stéfano.
El 7 de agosto de 1953 regresa Martí Carreto de Colombia sin resolver el caso Di Stéfano. Si el entonces presidente del Barça hubiera pagado los 27.000 dólares que reclamaba el Millonarios, Di Stéfano hubiera sido jugador del Barcelona, punto y final del asunto. Primer error. Pero hay más…
El 09 de agosto, Samitier abandona el Barça. El presidente del Barça, Enrique Martí Carreto, no encontró un acuerdo económico para renovar al que era considerado el mejor secretario técnico de España. El mismo que había conseguido el fichaje “imposible” de Kubala tres años antes, era también el único miembro del club que había logrado crear una relación de confianza con el delantero argentino y el que más apostó por su contratación.
Mientras tanto, Senior, tras no encontrar un acuerdo con Marti Carreto, habla con el Madrid, con quien mantiene buenas relaciones. Y a instancias de Álvaro Bustamante, un vicepresidente atrevido que iba más allá que Bernabéu, el Madrid decide comprar a Di Stéfano al Millonarios, por esos 27.000 dólares, la parte correspondiente de los derechos del jugador. Raimundo Saporta viaja a Bogotá para hacer la entrega del dinero.
Saporta prosiguió su viaje a Buenos Aires y visitó la sede del River Plate, donde pudo constatar que el Barcelona ya había efectuado un desembolso de dos millones de pesetas, por tanto, no podía el Madrid dar el golpe definitivo para hacerse con todos los derechos del jugador, aunque sí obtuvo garantías de no beligerancia del River en un posible futuro conflicto. Saporta viajó a Barcelona y mantuvo una entrevista con Di Stéfano en el Hotel Regina, donde le abonó sus primeras pesetas como integrante de la plantilla madridista.
La Federación Española, ante la cercanía del final del plazo para inscribir jugadores extranjeros para la temporada 1953- 54, se dirigió a la FIFA. En su respuesta, el máximo organismo futbolístico mundial decretó que: “Alfredo Di Stéfano no podrá jugar por ningún club español mientras su situación ante esta Federación Internacional no quede absolutamente aclarada”.
Madrid y Barcelona debían ponerse de acuerdo para, contando con el beneplácito de la FIFA, buscar una salida al futuro de Di Stéfano.
La directiva barcelonista hizo una última tentativa. El 26 de agosto el vicepresidente Narciso de Carreras se reunió con Alfonso Senior. Fue Carreras, y no Martí, quien acudió a esta reunión por las malas relaciones que persistían entre el presidente del Barcelona y el del club colombiano. El presidente del Millonarios confirmó al vicepresidente del Barcelona que todo estaba cerrado a favor del Madrid. Narciso de Carreras llegaba tarde para enderezar el rumbo equivocado tomado por su presidente.
Enrique Martí perdió los nervios y se dirigió unilateralmente a la directiva de la Juventus de Turín para traspasar los derechos del codiciado jugador argentino. Este acto provocó la indignación de Alfredo Di Stéfano, que no había sido consultado.
Ante la negativa del club turinés a entablar negociaciones sin tener el consentimiento de la FIFA, el presidente del Barça contactó entonces con el River Plate, con el objetivo de anular el contrato firmado entre los dos clubes y la devolución de todo el dinero pagado. El presidente del River Plate, molesto con el propósito de Marti, público este frío comunicado:
Enrique Martí y su directiva comprendieron que la solución pasaba por Chamartín y la FIFA. El organismo internacional designó como mediador a Muñoz Calero, ex presidente de la Federación Española de Fútbol y vocal FIFA. La solución que encontró junto a Mari y Bernabéu, fue que Di Stéfano jugara para el Madrid las temporadas 1953- 54 y 1955- 56, y en él Barça las 1954- 55 y 1956- 57. Cumplidas estas cuatro temporadas, ambos equipos deberían ponerse de acuerdo sobre el futuro del jugador en España.
Efectivamente, Di Stéfano no podía empezar a jugar con el Barça antes del 1 de enero de 1955, lo que significaba que el argentino debía jugar la primera temporada y la mitad de la segunda con los blancos y a partir del uno de enero con los azulgranas. Para contentar a todos, el mediador FIFA decidió cortar la manzana en dos. Di Stéfano alternaria entre los dos equipos españoles. El acuerdo se firmó el 15 de septiembre de 1953 entre ambos clubes y la FIFA.
El 22 de septiembre, tras los errores graves por la gestión del caso Di Stéfano y la no renovación de Samitier, Martí presenta su dimisión:
El 23 de Septiembre de 1953, Di Stéfano debutó oficialmente con el Real Madrid frente al Nancy. Los blancos pierden el partido por 2-4 en Chamartín. El 27 de septiembre, Di Stéfano disputa su primer partido en Liga con los blancos.
En este momento, el argentino sigue siendo jugador del Real Madrid y del Barcelona. En julio de 1954, según el acuerdo firmado por ambos presidentes y la FIFA, pasaría a defender la camiseta del F.C Barcelona.
Di Stéfano tiene un debut discreto con el Real Madrid. Llevaba varios meses sin jugar en competición, había engordado varios kilos y el Madrid no había logrado grandes resultados mientras que el Barça era líder del campeonato. En paralelo, Kubala se había recuperado contra todo pronóstico de su enfermedad meses antes y volvía a ser el líder del equipo y mejor jugador europeo. El equipo catalán era el vigente campeón de Liga y de la Copa del Generalísimo. Desde el club culé, diferentes informes desaconsejan el fichaje del argentino. Económicamente, el club azulgrana estaba pendiente de una posible recalificación de terrenos, por parte del gobierno español, para la construcción de su nuevo estadio, planeado para marzo de 1954.
Es entonces, el 14 de octubre, y tras 5 jornadas de Liga, cuando el Barça renuncia a todos los derechos de Di Stéfano, siempre y cuando obtenga del Madrid una compensación económica por todos los gastos relacionados con el fichaje del argentino. Agustín Montal y Alberto Maluquer manifestaron que el Barcelona era demasiado importante para compartir un jugador con un club rival y negociaron en Madrid con Santiago Bernabéu la solución final del caso.
El acuerdo final se firma el 23 de octubre de 1953. El Real Madrid pagó el doble de lo que el club culé había abonado al River Plate por el traspaso del argentino.
En 1954, salió el libro de Rafael Llorente, "Di Stéfano cuenta su vida..." donde el jugador comparte con los lectores cómo fue su fichaje por el Real Madrid y el desinterés del Barcelona....
"El Madrid se interesó por mi antes que el Barcelona... el Barça empezó a echarse atrás, tal vez pensando que, teniendo como tenían, asegurado el lleno total en su estadio... en realidad no necesitaban de mi concurso. Así pues el señor Marti, debió pensar que existían dificultades y desembolsos... la mejor solución era que me fuera al Juventus"
Mariano Gonzalvo, capitán del Barça por entonces y durante las Cinco Copas del Generalísimo, afirmó lo siguiente sobre el fichaje del astro argentino:
En la biografía autorizada sobre la vida de Di Stéfano, “Gracias Vieja”, escrita por Alfredo Relaño y Enrique Ortego, el ex jugador y presidente de honor del Real Madrid señaló siempre un embrollo jurídico-deportivo como responsable de su marcha al club merengue. A continuación, más declaraciones de la Saeta Rubia:
[Video] La historia del fichaje de Di Stéfano contada por Raimundo Saporta.
En 2017, salió a la luz un documento que muestra el acuerdo entre el River Plate y el Barcelona, firmado por Enrique Pardo, presidente del club del River Plate. Dicho documento prueba el pago realizado por el club azulgrana al club argentino por Di Stéfano.
El cuarto punto del documento entre River y Barça estipula lo siguiente:
"Todo el presente convenio queda supeditado a que para antes del 26 de julio el jugador Di Stéfano se incorpore real, física, jurídica y efectivamente al Fútbol Club Barcelona, habiendo zanjado cualquier dificultad que pudiera derivarse de su actuación en Colombia. De no operar estas condiciones, el convenio queda rescindido". Condición, que demuestra que ambos clubes estaban al tanto de la situación compleja de Di Stéfano.
Más de 30 páginas de documentos oficiales, telegramas, pagarés y comprobantes de pago fueron entonces encontrados por empleados del River Plate, en una oficina secundaria del Monumental. En la carpeta rescatada, se encuentra el papeleo que muestra los diferentes pasos que efectuó el Barça en la contratación del jugador, los contactos con Bernabéu y la oferta de Saporta al club argentino, además de los documentos de la FIFA y su resolución final en el caso Di Stéfano.
Por otro lado, sea en Buenos Aires, Bogotá o Barcelona, ningún documento existe con la firma de la Saeta Rubia con él Fútbol Club Barcelona, ni tampoco entre el club catalán y el Millonarios.
El jugador argentino nunca llegó a firmar un contrato con el Barcelona. "He recibido proposiciones oficiales del Madrid, y extraoficialmente del Barcelona" declaró la Saeta Rubia, cuando se encontraba entre los dos clubes españoles en el verano de 1953. Aunque es muy probable, que Di Stéfano se comprometiera oralmente con el equipo azulgrana antes de finalmente terminar en el Madrid.
En cuanto a documentos escritos u oficiales, solo existe el contrato que firmó Di Stéfano con el Real Madrid.
Alfredo Di Stéfano nunca jugó un partido oficial con el Barcelona, ni tampoco ningún amistoso antes de hacerlo con el Real Madrid. Existen muchas leyendas y desde ciertos sectores, se usaron fotos para manipular la verdad. En el verano de 1953, el Barça jugó tras la final de Copa (que ganó al Athletic de Bilbao), tres amistosos: uno en Perpiñán, otro en Manresa y el último en Badalona. Los 25, 28 y 29 de junio de 1953, respectivamente. En ninguno de ellos jugó Di Stéfano.
Después de eso, el Fútbol Club Barcelona se fue a Caracas, a la "Pequeña Copa del Mundo", en la que se enfrentan a una Selección de Caracas, el Corinthians y el Roma. Antes de regresar el Barça jugó el día 4 de agosto con el Curaçao. Di Stéfano no fue a esa gira. El Barcelona no le podía llevar porque pertenecía al Millonarios, que había denunciado el caso ante la FIFA.
Suele esgrimirse como prueba de que Di Stéfano llegó a jugar en el Barcelona y posteriormente ‘robado’ por el favoritismo que el franquismo otorgaba al Madrid la siguiente foto:
Foto que corresponde a un partido de exhibición dos años después de los hechos, el 12 de junio de 1955, ante el Vasco da Gama, cuando Di Stéfano ya había jugado dos temporadas completas en el Madrid. Acudió como invitado a ese partido, en el que ganó el Barça 1-0, con gol de Isidro Flotats. Junto a Di Stéfano podemos reconocer a Luis Suárez y Villaverde, que en el verano de 1953 no estaban en el Barcelona. Luis Suárez y Villaverde se incorporaron al equipo catalán en el verano de 1954.
Para muchos aficionados puede parecer extraño que un jugador con contrato se enfunda la camiseta de un equipo rival, pero por aquel entonces era cosa común. Existen muchos ejemplos. En agosto de 1959, Alfredo Di Stéfano jugó un amistoso contra el Newcastle con la camiseta del Mallorca. Fue con motivo de la inauguración de la luz artificial en el Lluís Sitjar.
El propio Kubala jugó con el Madrid, en una delantera en la que coincidió con Di Stéfano, en el homenaje a Molowny. Collar, el extremo izquierdo del Atlético, también estuvo en esa delantera.
Los tres madridistas, Di Stéfano, Molowny y Oliva, vestido del Atlético en el homenaje a Escudero.
Di Stéfano (abajo a la izquierda) con el Deportivo, en el homenaje a Cuenca.
Di Stéfano, junto a Puskas y Kubala, de nuevo vestido con la camiseta azulgrana en el homenaje de este último. Celebrado el 30 de agosto de 1961.
Otras dos fotos, que corresponden a un reportaje publicado en "Vida Deportiva", suelen producir confusión o se han utilizado para manipular la historia. Están tomadas en Las Corts, las gradas están vacías ya que no corresponden a ningún partido. Reportaje realizado mientras Di Stéfano esperaba en Barcelona, que Enrique Martí resolviera su futuro con el Millonarios.
En el verano del 1953, Di Stéfano jugó un partido veraniego amateur con la camiseta del Palafrugell, cerca de Girona y durante la gira del Barça por América). Participó en otro partido de exhibición en El Masnou, entre una selección de "veraneantes" y "residentes".
El 24 de agosto de 1953 entró en vigor la nueva disposición legal de la Delegación Nacional de Deportes sobre la prohibición de nuevas incorporaciones de jugadores extranjeros al fútbol español. Es decir, tres meses después de la llegada de Di Stéfano a Barcelona. Si el argentino no fichó ni debutó con el Barça, en ningún caso fue la mencionada ley quien lo impidió, sino la FIFA en un primer tiempo y luego la torpeza del propio presidente del Barça. Entre julio y agosto de aquel año, Enrique Martí pudo concretar el fichaje pagando los 27.000 dólares que Millonarios exigía. El mandatario azulgrana regresó de su viaje a América el 07 de agosto de 1953.
En septiembre, el FC Barcelona y el Real Madrid, elevaron un recurso de súplica al General Moscardó, manifestando que las gestiones y compromisos entre todas las partes habían cristalizado con anterioridad a la entrada en vigor de la citada prohibición. Otros clubes de la Liga se juntaron al recurso por casos similares. En ese momento, tanto el Barça como el Madrid, no sabían dónde finalmente jugaría la Saeta Rubia.
El 15 de septiembre se firmó el acuerdo entre el Barcelona, Real Madrid y FIFA para compartir el jugador.
El 19 de septiembre de 1953, la Delegación Nacional de Deportes hacía público el siguiente comunicado:
La Delegación Nacional de Deportes aprobaba tácitamente que Alfredo Di Stéfano, argentino, pudiera actuar dos temporadas en el Real Madrid y otras dos en el Barcelona.
Además de a Di Stéfano, se les abrió las puertas a Faas Wilkes (holandés fichado por el Valencia), Andrés Prieto (chileno para el Español) y Carlos Ducasse (francés para el Valladolid). Los tres se encontraban en el mismo caso: sus fichajes se estaban tramitando antes de que el Gobierno cerrará la importación de extranjeros.
El 23 de octubre de 1953 , el Barcelona renuncia a Di Stéfano, el Madrid compra la totalidad de su ficha.
Dicha ley, que puede parecer un detalle en la historia, ha sido utilizada de forma errónea y/o manipulada en diferentes artículos y documentales culés para acusar al Gobierno de Franco de impedir el fichaje de Di Stéfano por el Barcelona. Una vez efectuado la cronología de los hechos, los argumentos quedan en evidencia.
Desde 1929 a 1974, era usual que se abriera y cerrara una y otra vez el mercado español a los futbolistas extranjeros. Para los curiosos, este extracto de Primera apertura de extranjeros en la liga lo explica a la perfección.
Las diferentes negociaciones del Barcelona con el Millonarios y particularmente la que trataron Enrique Martí y su abogado durante la gira del equipo por América, entre el 08 de julio y el 07 de agosto, demuestran que:
1) La FIFA dio razón al Millonarios en su queja, y que parte de los derechos de Di Stéfano pertenecían al club colombiano.
2) Para que el Barcelona pudiera alinear a Di Stéfano, la FIFA exigía al club catalán adquirir los derechos correspondientes al Millonarios.
3) Enrique Martí estaba consciente de ello y es la razón por la que negoció, en el verano de 1953, los derechos del jugador al Millonarios para poder alinear a Di Stéfano antes del 1 de enero de 1955.
Por lo tanto, deja en evidencia las teorías que desde un sector de Barcelona afirman que los derechos del Millonarios eran nulos.
Aflonso Senior, en una entrevista para El Mundo Deportivo en agosto de 1953, confirma que la FIFA reconoce que el jugador Di Stéfano pertenece al Millonarios y solo el club colombiano "puede operar con el jugador" hasta octubre de 1954.
Como precedentemente explicado, la FIFA intervino en varias ocasiones en el "Caso Di Stéfano". En su última mediación, el 15 de septiembre de 1953, el agente FIFA, Muñoz Calero, se reunió con el presidente del Barça y del Madrid para solucionar el tema y acordaron compartir el delantero entre ambos clubes. La propia FIFA, en su página web oficial confirma esta versión.
Desde Barcelona y a partir de los años 2000, diferentes versiones afirman que una delegación franquista o una comisión de 17 miembros con nombres y títulos que no corresponden a la realidad histórica, decidieron el futuro de Di Stéfano. No existen documentos ni pruebas de dichas versiones que contradicen a la propia FIFA. Además, aunque el gobierno, Franco, o cualquiera comisión hubiese llegado a una conclusión, Di Stéfano no hubiese podido jugar ni en España ni en ningún otro país adscrito al organismo internacional mientras éste, la FIFA, no hubiese dado carpetazo al contencioso sobre el jugador argentino.
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